Quebrada de los cuervos

El departamento de Treinta y Tres siempre tuvo para mí un atractivo especial, ya que la familia de mi mamá era de esa zona y siempre nos hacía cuentos de cuando iba a visitar a los parientes, siendo niña a Santa Clara de Olimar. También por los temas musicales que pintan muy bien la región, así como de los conjuntos que los interpretan “Los Olimareños” por ejemplo.
Así que un día partimos para la zona, tratando de conocer sus rincones.
El primer lugar que visitamos fue la Quebrada de los Cuervos, al que llegamos por un largo y sinuoso camino como se ve en la foto que nos permitía disfrutar una buena panorámica de la zona.




Cuando llegamos al lugar nos fuimos por un sendero angosto que era el inicio del recorrido, el viento y el movimiento de las hojas dan la sensación de que vamos a ver algo grande. Así fue, al llegar al mirador nos encontramos con la “Quebrada de los Cuervos”.

Es una garganta formada por el curso del arroyo Yerbal entre los cerros de la zona. El desnivel entre la altura de los cerros y el trayecto del río es lo que hace lo espectacular del paisaje. Se escucha el sonido del agua y se ven lo buitres sobrevolando la zona, sí son buitres no cuervos.

Cuando estuvimos había que bajar por las piedras hasta el fondo, nuestro estado físico en ese momento no lo permitió, hoy en día dicen que se facilitó el acceso. Tal vez en cualquier momento regrese porque me quedé con ganas de ver el sector más bajo, dónde nos comentaron que la vegetación y el microclima son muy atractivos.